Los trabajos más ruidosos de Norteamérica (¡y cómo podemos proteger su audición!)

Tenemos un problema de ruido, y usted podría estar en peligro

Aunque es difícil clasificar a todo un continente como "demasiado ruidoso", Estados Unidos y Canadá tienen sin duda un problema de ruido. Desde el ruido habitual de las carreteras hasta las sirenas de emergencia, las obras en construcción, la música a todo volumen en los auriculares y mucho más, hay un zumbido continuo de actividad que llega a nuestros oídos, ¡algunos más perceptibles que otros!

Pero los sonidos cotidianos no son nada comparados con los 22 millones de estadounidenses y más de 11 millones de canadienses que están expuestos a niveles peligrosos de ruido en el trabajo.

Esos 33 millones de personas desempeñan funciones que necesitamos y de las que dependemos para que nuestra sociedad siga funcionando día tras día. Por ello, los trabajadores no sólo corren el riesgo de exponerse ocasionalmente a niveles de ruido peligrosos. Viven en entornos ruidosos durante horas todos los días. Entonces, ¿quiénes son las personas que arriesgan su salud auditiva cada vez que fichan? He aquí una lista de los 5 sectores con mayor riesgo de pérdida de audición.

Los 5 trabajos más ruidosos de Norteamérica

1. Construcción

Con niveles que pueden alcanzar los 120-130 dB, las obras de construcción se encuentran entre los entornos más ruidosos. De hecho, todas las actividades de la construcción son conocidas por ser ruidosas: martillar, taladrar, serrar. Lo que sea, es ruidoso. Con el uso habitual de herramientas eléctricas y maquinaria de gran tamaño, los trabajadores de la construcción recurren regularmente a medidas de protección para mantener su audición a salvo.

2. Fabricación

Aunque los puestos de trabajo en el sector manufacturero han disminuido en los últimos 40 años en Estados Unidos, tanto este país como Canadá siguen produciendo más con menos. Una amplia gama de productos, como metales fabricados y maquinaria, productos eléctricos y prendas de vestir y textiles, significa que los trabajadores de la industria utilizan una gran variedad de máquinas a la vez, a menudo a gran escala. Incluso las pequeñas fábricas pueden correr el riesgo de sufrir grandes problemas de ruido.

3. Trabajo en transportes y almacenes

Los trabajadores de transportes y almacenes corren un alto riesgo de exposición a niveles peligrosos de ruido. A pesar de ello, un gran porcentaje de trabajadores del transporte afirman con frecuencia no llevar protección auditiva en el trabajo. Con niveles de dB que superan regularmente los 85 (el umbral de daño auditivo potencial tras una exposición prolongada), es imperativo que los trabajadores de estos sectores utilicen equipos de protección. Los directivos pueden fomentar el uso adecuado de los equipos de protección proporcionando equipos cómodos y eficaces durante horas.

4. Militares

La pérdida de audición es muy común entre los veteranos y los militares. El Departamento de Asuntos de Veteranos (VA) de EE.UU. informó de que más de 1,3 millones de veteranos reciben indemnizaciones sólo por pérdida de audición. Del mismo modo, el Grupo de Servicios Sanitarios de las Fuerzas Armadas Canadienses informó del gasto de alrededor de 1,1 millones de dólares anuales en costes sanitarios relacionados con la pérdida de audición.

A medida que los investigadores siguen encontrando más formas de prevenir, diagnosticar y tratar la pérdida de audición y otros problemas relacionados, las personas que trabajan en puestos de riesgo pueden tomar medidas para protegerse lo antes posible.

Por ejemplo, debido a un estudio realizado en 2006 en el Naval Air Warfare Center Aircraft Division (NAWCAD) que indicaba que el personal de vuelo se colocaba con frecuencia tapones de espuma para los oídos de forma incorrecta, ¡la Armada recomienda ahora tapones a medida que garantizan un mayor nivel de protección para los miembros del servicio!

5. Primeros intervinientes

En su trabajo, los bomberos, policías y otros miembros del personal de primera intervención están expuestos a una gran cantidad de ruidos peligrosos. A pesar de ello, un estudio de 2023 descubrió que la mayoría de los empleados de estos campos no eran conscientes del riesgo auditivo al que se enfrentaban y, por lo tanto, no participaban en las prácticas de protección auditiva. Asegurarse de que los equipos conocen la política de la empresa y cómo obtener ayuda es una parte fundamental de las medidas de protección.

Cómo podemos proteger a nuestros trabajadores

Tanto los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) como el Centro Canadiense de Salud y Seguridad en el Trabajo (CCOHS) disponen de una Jerarquía de Control de la Pérdida Auditiva (simplemente Jerarquía de Controles en Canadá), que detalla los pasos preventivos que pueden dar los empresarios para reducir la exposición a ruidos peligrosos como parte de un programa de conservación de la audición.

El primer nivel de control preventivo es el Equipo de Protección Personal, o como se conoce más comúnmente: EPI. Existen varios niveles de protección auditiva que se incluyen en los EPI. Los tapones desechables y las orejeras son opciones rápidas y asequibles que existen desde siempre.

Con los avances modernos en tecnología auditiva, existen mejores opciones en el mercado que proporcionan a los usuarios una mayor protección y comodidad para un uso prolongado. En lugar de comprar paquetes interminables de tapones de espuma, cada vez son más las personas que optan por una protección auditiva personalizada que reduce significativamente los efectos nocivos del trabajo en entornos ruidosos.

Aunque los EPI son vitales para la seguridad laboral, los empresarios deben tomar medidas adicionales para proteger a sus trabajadores (y a su empresa). Los controles administrativos y los controles de ingeniería, incluido el mantenimiento de los equipos, el ajuste de los horarios de funcionamiento y la modificación de las fuentes de ruido, deben ser acciones preventivas habituales.

Las formas más eficaces de control de la pérdida de audición son la eliminación y la sustitución. Esto significa eliminar los peligros para la audición, adquirir equipos silenciosos y diseñar procesos lo más silenciosos posible. Siguiendo estos pasos, podemos prevenir la pérdida de audición inducida por el ruido y aumentar la retención y satisfacción de los trabajadores en estas industrias.

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